Ir al contenido principal

Para sanar hay que permitirse.

Reconocer que no tengo siempre la respuesta ni quiero tenerla,

que no siempre puedo con todo, reconocer que a veces no me entiendo,
no contener la lágrima cuando se desborda de mis ojos, reconocer que también tengo miedo, reconocer que a veces quisiera escapar de mí y de mis pensamientos,
salir corriendo de mis límites.
No negar a la tristeza cuando viene a visitarme, permitirme en ocasiones que me abrace la melancolía, y que  no me salga la risa
si todo esto no lo escondo ni lo ignoro, podré  escuchar a mi alma.

Hoy me desperté con mucha energía y ganas de abrazar al mundo, deseando dejar los problemas atrás… 
Sí, es atrás en el pasado donde debiera estar todo aquello que nos hace daño, lo que nos hace pasar las noches en completo insomnio…
Descubrí que el mundo es gris y que el color lo pintan tu y tus ganas de seguir viviendo.
Si sientes que comienza todo gris…
¡Decídete y llénalo de color!
Descubrí que no soy mejor que nadie,pero que nadie es mejor que yo.
La vida es sueño, hazlo realidad.
No te detengas, construye nuevos sueños. 
Recomenzar es darse una nueva oportunidad, es renovar las esperanzas en la vida y lo mas importante…Creer en ti mismo.
si la vida es tristeza, supérala.
Sufriste mucho en este período??… Fué aprendizaje.
Lloraste mucho??… Fué limpieza del alma.
Sentiste rencor??… Fué para aprender a perdonar.
La vida es una oportunidad, aprovéchala.
Cierra los ojos. Respira hondo, piensa claro…
¡Y vive como nunca el día de hoy!
¡Los mejores colores de la vida están siempre dentro de ti mismo!
La vida es belleza, admírala.
Abrir los ojos a otro día, es un regalo que no siempre vas a tener.
En la vida lo único que cuenta son las personas que amas, los recuerdos que dejas y lo que llevas por dentro.

Relacionado


SER ENEMIGO DE UNO MISMO VIVIR DESPEINADA

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

LA TIERRA Y EL AZÚCAR, cuento

El que las hace, las paga. Frases y citas

El que la hace la paga, es un refrán que se escucha decir con frecuencia es una frase vengativa, nuestras malas acciones se pagan En los refranes  encontramos aquello que es conocido como sabiduría popular, a veces encontramos refranes contradictorios como por ejemplo  al que madruga Dios lo ayuda, con aquella otra que la objeta, al afirmar que no por mucho madrugar amanece más temprano. O también por una parte escuchamos decir que sobre gustos no hay nada escrito, enunciado que se ve rechazado en forma contundente cuando se afirma que hay gustos que merecen palos. Dentro del mismo contexto tenemos  el que las hace las paga y su complemento, "el que paga descansa" Aquí está presente no solo la convicción de que los actos perversos traen consecuencias, sino que también alude a un ser trascendente que actúa como Justiciero con castigos y premios, que es como algunos conciben a Dios ¿Que significa: "Quien riendo la hace, llorando la paga. Ley de la vida"? Básicamente t...

El síndrome de Prader-Willi (SPW)

El  síndrome de Prader-Willi  (SPW) es consecuencia de una alteración genética.

Diferentes tipos de parejas

Las distintas formas de relación de parejas que se pueden encontrar son tantos como tipos de personas existen en el mundo, es decir que son muy variados y que cada vínculo podría considerarse único, no obstante se pueden generalizar según determinadas

Los hijos: espejos que nos invitan a crecer

  Los hijos: espejos que nos invitan a crecer Tener hijos es, sin duda, una de las experiencias más intensas y transformadoras que puede vivir una persona. No solo por el amor que despiertan, sino porque en su presencia y comportamiento muchas veces se reflejan partes de nosotros mismos: nuestras luces, nuestras sombras, nuestras heridas no sanadas y nuestros anhelos más profundos. ¿Quiénes son realmente nuestros hijos ? Desde una perspectiva psicológica, los hijos no son un proyecto que debamos moldear a nuestra imagen y semejanza. Son personas en proceso de construcción, con su propia identidad, temperamento, y forma de ver el mundo. Nuestra tarea como madres, padres o figuras cuidadoras no es controlar su camino, sino acompañarlos en el suyo. Muchas veces, sin darnos cuenta, proyectamos en ellos nuestros miedos o frustraciones: el deseo de que no sufran, de que no cometan nuestros errores, o incluso de que logren lo que nosotros no pudimos. Esta sobreprotección o exigencia p...