Ir al contenido principal

¿como amar saludablemente? "No te necesito, te elijo"




No te necesito, te elijo,hace falta dejar muchas cosas atrás y estar bastante bien con uno mismo para pronunciar esas palabras. Entre otras cosas es necesario dejar la cobardía y
animarse con coraje, valentía y paciencia a conocerse y a aceptarse tal y como uno es.

Paciencia para entender que es más importante estar con alguien porque lo elijo y no porque lo necesito, porque eso significa que no necesito complementos para tapar mis carencias o mis defectos. Nadie en la vida tiene la responsabilidad de completar lo que nos falta, la única persona que necesitamos para vivir es a nosotros mismos.  
Se trata de elegir a alguien para estar a su lado y disfrutar el uno del otro.
Para lograr esto hay que dejar de esclavizarse y de encadenarse al pasado emocional y no dejar que los demás definan quien eres. 
crear un lazo profundo y auténtico con uno mismo, porque si no amas con libertad es preferible no amar, pues la dependencia emocional destruye.
Elijo el amor pero sigo siendo dueño de mí. Porque el sentimiento de amor más fuerte que existe es el amor hacia uno mismo. Porque, como dijo Perls:
“Yo soy Yo y Tú eres Tú. Yo no estoy en este mundo para cumplir tus expectativas y tú no estás en este mundo para cumplir las mías.
Yo soy yo… Un ser completo aún con mis carencias. Tú eres tú… Un ser completo aún con tus carencias.

Si nos buscamos, nos encontramos y nos aceptamos, si somos capaces de salvar nuestras diferencias y de caminar juntos nuestros misterios podremos estar el uno junto al otro.
Tener siempre presente que si intento complacer al otro, me traiciono y si intento que el otro sea como yo quiero lo estoy traicionando a él. Entonces ya no hablaríamos de amor, (de un amor sano),sino de egoísmo.
                                             Laura Maffia


Quizás te interese
AMARSE DE VERDAD FRASES DE AMOR

Comentarios

Entradas más populares de este blog

El que las hace, las paga. Frases y citas

El que la hace la paga, es un refrán que se escucha decir con frecuencia es una frase vengativa, nuestras malas acciones se pagan En los refranes  encontramos aquello que es conocido como sabiduría popular, a veces encontramos refranes contradictorios como por ejemplo  al que madruga Dios lo ayuda, con aquella otra que la objeta, al afirmar que no por mucho madrugar amanece más temprano. O también por una parte escuchamos decir que sobre gustos no hay nada escrito, enunciado que se ve rechazado en forma contundente cuando se afirma que hay gustos que merecen palos. Dentro del mismo contexto tenemos  el que las hace las paga y su complemento, "el que paga descansa" Aquí está presente no solo la convicción de que los actos perversos traen consecuencias, sino que también alude a un ser trascendente que actúa como Justiciero con castigos y premios, que es como algunos conciben a Dios ¿Que significa: "Quien riendo la hace, llorando la paga. Ley de la vida"? Básicamente t...

LA TIERRA Y EL AZÚCAR, cuento

Pocas palabras, muchas verdades

Con el tiempo aprendí, que soy mucho más de lo que veo  cuando me paro

Diferencias entre Padres sobreprotectores, liberales y autoritarios

Existen distintos tipos de padres , aquí nos ocuparemos de  hablar sobre estos tres modelos y como influyen en el niño.

Los hijos: espejos que nos invitan a crecer

  Los hijos: espejos que nos invitan a crecer Tener hijos es, sin duda, una de las experiencias más intensas y transformadoras que puede vivir una persona. No solo por el amor que despiertan, sino porque en su presencia y comportamiento muchas veces se reflejan partes de nosotros mismos: nuestras luces, nuestras sombras, nuestras heridas no sanadas y nuestros anhelos más profundos. ¿Quiénes son realmente nuestros hijos ? Desde una perspectiva psicológica, los hijos no son un proyecto que debamos moldear a nuestra imagen y semejanza. Son personas en proceso de construcción, con su propia identidad, temperamento, y forma de ver el mundo. Nuestra tarea como madres, padres o figuras cuidadoras no es controlar su camino, sino acompañarlos en el suyo. Muchas veces, sin darnos cuenta, proyectamos en ellos nuestros miedos o frustraciones: el deseo de que no sufran, de que no cometan nuestros errores, o incluso de que logren lo que nosotros no pudimos. Esta sobreprotección o exigencia p...