Ir al contenido principal

Curiosidades de Freud



Sigmund Freud nació el 6 de mayo de 1856 en la localidad de Freiberg (Moravia), ahora llamada Príbor, situada en la República Checa. Murió en Londres, el 23 de septiembre de 1939, a la edad de 83 años.

Freud, neurólogo de origen judío, es considerado el padre del psicoanálisis y es una de las figuras más relevantes del siglo XX.


 Curiosidades de Freud


Freud sentía un miedo inexplicable por el número 62 y todas las combinaciones posibles de estos dos números. Nunca se alojaba en una habitación de hotel con ese número o en hoteles que tuvieran más de 62 habitaciones. Si se encontraba con el número 62, lo rehuía cada vez que lo encontraba.

También sentía terror por los helechos y estaba obsesionado por los números 23 y 28.

Almorzaba todos los días a la 1 en punto. 

Salía a dar un paseo de tres kilómetros por las mismas calles

Freud era un fumador compulsivo

Un genio desde corta edad
La gran elegancia y la sabiduría que imanaban sus escritos en su etapa de estudiante fueron reconocidos y premiados por su excepcionalidad. Por ello, Freud ganó, entre otros galardones, el premio Goethe de literatura del año 1930.

Solo tenía tres trajes, tres mudas de ropa interior y tres pares de zapatos

Una de sus aficiones principales era el coleccionismo

Era un ferviente admirador de Cervantes

Sigmund Freud aprendió español para poder leer la celebérrima obra de Miguel de Cervantes, "El Quijote".

Freud rehuía de la vida social. 

Sigmund Freud afirmó en una ocasión: "La gran pregunta que nunca ha sido respondida y a la cual no he sabido dar una explicación convincente a pesar de mis treinta años de investigación de la psique femenina, es: ¿qué quiere una mujer?".

"Topsy" o Jofi. El perro de Freud se convirtió en su asistente durante sus sesiones de análisis

Analizó a su hija  Anna Freud

Sufría cáncer de garganta,  solicitó a su médico una muerte asistida.Así, su médico de confianza le inyectó morfina para morir.

Un cráter de la Luna lleva su nombre

Te puede gustar



















Comentarios

Entradas más populares de este blog

LA TIERRA Y EL AZÚCAR, cuento

El que las hace, las paga. Frases y citas

El que la hace la paga, es un refrán que se escucha decir con frecuencia es una frase vengativa, nuestras malas acciones se pagan En los refranes  encontramos aquello que es conocido como sabiduría popular, a veces encontramos refranes contradictorios como por ejemplo  al que madruga Dios lo ayuda, con aquella otra que la objeta, al afirmar que no por mucho madrugar amanece más temprano. O también por una parte escuchamos decir que sobre gustos no hay nada escrito, enunciado que se ve rechazado en forma contundente cuando se afirma que hay gustos que merecen palos. Dentro del mismo contexto tenemos  el que las hace las paga y su complemento, "el que paga descansa" Aquí está presente no solo la convicción de que los actos perversos traen consecuencias, sino que también alude a un ser trascendente que actúa como Justiciero con castigos y premios, que es como algunos conciben a Dios ¿Que significa: "Quien riendo la hace, llorando la paga. Ley de la vida"? Básicamente t...

El síndrome de Prader-Willi (SPW)

El  síndrome de Prader-Willi  (SPW) es consecuencia de una alteración genética.

Diferentes tipos de parejas

Las distintas formas de relación de parejas que se pueden encontrar son tantos como tipos de personas existen en el mundo, es decir que son muy variados y que cada vínculo podría considerarse único, no obstante se pueden generalizar según determinadas

Los hijos: espejos que nos invitan a crecer

  Los hijos: espejos que nos invitan a crecer Tener hijos es, sin duda, una de las experiencias más intensas y transformadoras que puede vivir una persona. No solo por el amor que despiertan, sino porque en su presencia y comportamiento muchas veces se reflejan partes de nosotros mismos: nuestras luces, nuestras sombras, nuestras heridas no sanadas y nuestros anhelos más profundos. ¿Quiénes son realmente nuestros hijos ? Desde una perspectiva psicológica, los hijos no son un proyecto que debamos moldear a nuestra imagen y semejanza. Son personas en proceso de construcción, con su propia identidad, temperamento, y forma de ver el mundo. Nuestra tarea como madres, padres o figuras cuidadoras no es controlar su camino, sino acompañarlos en el suyo. Muchas veces, sin darnos cuenta, proyectamos en ellos nuestros miedos o frustraciones: el deseo de que no sufran, de que no cometan nuestros errores, o incluso de que logren lo que nosotros no pudimos. Esta sobreprotección o exigencia p...