Ir al contenido principal

No tolero a mi pareja

No tolero a mi pareja



¿Qué podemos hacer cuando estamos atraídos hacia una persona como para casarse con ella pero tiene una característica que, de pronto, no puede tolerar?


1. El primer lugar debemos admitir la posibilidad de que, inconscientemente deseamos ser como lo que estamos condenando. Por ejemplo si no puede soportar el desorden de su compañero/a, considere la posibilidad de que, reprimido en su interior, late el deseo de ser totalmente desordenada.
 
"Pero yo no deseo ser desordenada- puede protestar enfurecidamente-. Yo quiero que mi pareja sea ordenada. No puedo soportar su desorden".

La pregunta correcta que debemos hacernos es:

Si tener una pareja ordenada era algo tan importante para mi, ¿por qué me case con alguien desordenado? 
 

2. Algunas veces simplemente comprendiendo lo que está pasando, las personas pueden sentir menos temor y no situarse a la defensiva.Descubrir algunos episodios o relaciones del pasado, que te hicieron sentir mal.Lograr empatía con tu pareja.

3. Tal vez puedes pensar en un pequeño cambio, pedirlo de un modo amable, empezar cambiando tu algunas cosas.

4. Finalmente, al analizar tus deseos de intenta modificar a tu pareja, asegúrate de que no entrar en una lucha de poder. Ten en cuenta que, casi cualquier desacuerdo, puede simbolizar una lucha por el control dentro de la relación matrimonial.

 Dado que la necesidad de tener el control no es algo que reconozcamos fácilmente, una pareja pueden llegar a pelearse una y otra vez sobre si deben gastar o ahorrar (o sobre cualquier otro problema) sin discutir jamás el problema real de por qué cada uno de ellos necesita salirse con la suya.

La solución es abrirse al dialogo, ponerse en el lugar del otro, reconocer nuestros errores, tranquilizarse y apoyarse mutuamente y sentirse más receptivos hacia la idea de hacer algunas concesiones, aceptar otras y compartir el poder.

Te puede interesar
COMO RESOLVER UNA CRISIS DE PAREJA PAREJA SEGÚN LOS SIGNOS

Comentarios

Entradas más populares de este blog

LA TIERRA Y EL AZÚCAR, cuento

El que las hace, las paga. Frases y citas

El que la hace la paga, es un refrán que se escucha decir con frecuencia es una frase vengativa, nuestras malas acciones se pagan En los refranes  encontramos aquello que es conocido como sabiduría popular, a veces encontramos refranes contradictorios como por ejemplo  al que madruga Dios lo ayuda, con aquella otra que la objeta, al afirmar que no por mucho madrugar amanece más temprano. O también por una parte escuchamos decir que sobre gustos no hay nada escrito, enunciado que se ve rechazado en forma contundente cuando se afirma que hay gustos que merecen palos. Dentro del mismo contexto tenemos  el que las hace las paga y su complemento, "el que paga descansa" Aquí está presente no solo la convicción de que los actos perversos traen consecuencias, sino que también alude a un ser trascendente que actúa como Justiciero con castigos y premios, que es como algunos conciben a Dios ¿Que significa: "Quien riendo la hace, llorando la paga. Ley de la vida"? Básicamente t...

El síndrome de Prader-Willi (SPW)

El  síndrome de Prader-Willi  (SPW) es consecuencia de una alteración genética.

Diferentes tipos de parejas

Las distintas formas de relación de parejas que se pueden encontrar son tantos como tipos de personas existen en el mundo, es decir que son muy variados y que cada vínculo podría considerarse único, no obstante se pueden generalizar según determinadas

Los hijos: espejos que nos invitan a crecer

  Los hijos: espejos que nos invitan a crecer Tener hijos es, sin duda, una de las experiencias más intensas y transformadoras que puede vivir una persona. No solo por el amor que despiertan, sino porque en su presencia y comportamiento muchas veces se reflejan partes de nosotros mismos: nuestras luces, nuestras sombras, nuestras heridas no sanadas y nuestros anhelos más profundos. ¿Quiénes son realmente nuestros hijos ? Desde una perspectiva psicológica, los hijos no son un proyecto que debamos moldear a nuestra imagen y semejanza. Son personas en proceso de construcción, con su propia identidad, temperamento, y forma de ver el mundo. Nuestra tarea como madres, padres o figuras cuidadoras no es controlar su camino, sino acompañarlos en el suyo. Muchas veces, sin darnos cuenta, proyectamos en ellos nuestros miedos o frustraciones: el deseo de que no sufran, de que no cometan nuestros errores, o incluso de que logren lo que nosotros no pudimos. Esta sobreprotección o exigencia p...