PSICOSABER ( Casi nada es lo que parece.)

   Había una vez estatua, cuyo dedo índice estaba en posición de señalar. Llevaba la inscripción: “Para obtener un tesoro golpea en este sitio”.

Nasrudin se cayo de una escalera y se hizo mucho daño. A pesar de los emplastos y de las pociones, el dolor le hacía sufrir terriblemente. Sus amigos fueron a consolarlo:

Cinco cazadores hambrientos partieron a cazar un ganso. Uno era ciego, el otro cojo, el tercero sordo, el cuarto estaba desnudo y el quinto tenía una carabina sin cañones ni gatillo. Entre arbustos que no habían crecido, buscaban un ave que aún no había nacido.

Cuenta la historia, que lo único que cierto maestro sufí dejó en herencia a sus cinco discípulos fue una hermosa alfombra de oración cuadrada.

Alquien le dijo a un Sufi: – Enséñame a rezar. El Sufi dijo: – No sólo estás ya rezando, sino que una parte de tu mensaje está constantamente ocupada en la oración.

Había una vez un mago que construyó una casa cerca de una aldea grande y próspera. Un día invitó a toda la gente de la aldea a un banquete. – Antes de que comamos, dijo, tenemos algunas diversiones.

-¿Cómo es que usted se inició en la vida espiritual? –preguntó uno de los discípulos al maestro Sufi Shams Tabrizi.